Garantizar el acceso a una energía asequible, segura, sostenible y moderna para todos/as.
Cada día utilizamos combustibles fósiles como petróleo, gas y carbón, contribuyendo así a las emisiones de gases de efecto invernadero. Para reducir la huella ecológica, deberíamos ser conscientes de la cantidad de energía que consumimos e intentar reducir nuestro consumo de energías no renovables. Para limitar el impacto ecológico, social y económico negativo es crucial, como personas consumidoras, pasar al uso de recursos energéticos renovables y, en general, consumir menos energía.
“Los combustibles fósiles -petróleo, carbón, gas- contribuyen activamente al calentamiento global. Actualmente, la mayor parte de los países occidentales son totalmente dependientes del petróleo, lo que los hace muy vulnerables ya que la extracción llegará a ser más costosa y los precios subirán debilitando drásticamente sus economías. La lucha por el control de los combustibles fósiles es, y será, la causa de numerosos conflictos y de situaciones geopolíticas que ponen en peligro a muchas poblaciones. Esto ya sucede. Además, la energía nuclear es demasiado cara y peligrosa, consume enormes cantidades de agua y todavía no sabemos cómo deshacernos de los residuos tóxicos que produce.” (demain-lefilm.com, 2014)
El alumnado puede contribuir al ODS 7 cambiando sus hábitos de consumo de energía y promoviendo el acceso a una energía asequible y limpia para todas las personas. Puedes empoderar a tus estudiantes para que contribuyan al ODS 7 enseñándoles a pensar de manera sistémica y a visualizar un futuro que tenga en cuenta del impacto a largo plazo y a escala mundial de sus decisiones individuales relacionadas con el consumo de energía a corto plazo. Tal visión tiene que considerar tanto el aspecto ecológico como el social y económico. Para ello se requiere también la capacidad del alumnado de facilitar el cambio para reclamar más recursos de energía sostenible. El ODS 7 incluye sub-objetivos relacionados con: el aumento de y el acceso a energía asequible, fiable, moderna y renovable; la investigación sobre energías alternativas; y el desarrollo de tecnología e infraestructuras de energía limpia, especialmente en los países menos avanzados.